notas

Las dos batallas

Published by:

Por Gabriel Mariotto
Cuando Megafón en su tercera y última comprobación empírica, vuelve de la cancha acompañado por su Suegra y su compañera Patricia Bell, en el caserón de Flores comienza a planear sus dos batallas. Una y otra contemporáneas, una y otra entremezcladas en su dependencia, ya que no se podrá ser victorioso en una si se resulta derrotado en la otra.

En estos días, como cantara Silvio Rodríguez, cada militante debe convertirse en un Megafón combatiente de las dos batallas que tenemos por delante. Porque se presenta ante nosotros la batalla terrestre de las elecciones de Octubre y, al mismo tiempo, por estos días habremos de vivir la batalla celeste que representa la defensa de un viejo sueño convertido en Ley. Nuestro Gobierno es un maestro en convertir las viejas pesadillas en sueños nuevos y los sueños nuevos en leyes efectivas. Así fue como a la pesadilla de las AFJP, la soñamos de vuelta en manos del Pueblo trabajador y a través de la Ley recuperamos efectivamente esos millonarios recursos que pasaron de manos de la especulación a manos de un Estado que puso esos recursos a favor de todos los argentinos. Así fue como recuperamos nuestra línea de bandera, y la pesadilla de tantos trabajadores aeronáuticos se reconvirtió en el sueño de los padres de nuestra aviación civil, para por Ley recuperar el azul y blanco no sólo en sus fuselajes sino en su sentido principal conectando a la Argentina toda. Así YPF, vaciada en su economía y en su razón de ser, ha vuelto a ser el sueño de la “entraña petrolera” de Jaime Dávalos y por esas manos levantadas desde las bancas compañeras hoy nuestra empresa petrolera vuelve a estar al servicio de la Patria y de su Pueblo.
Entonces este tiempo es de batallar, es el de recorrer puerta por puerta los barrios de nuestros Pueblos y Ciudades, es el de convencer a los que dudan, quitarle argumentos a los que proponen otros rumbos, no dejar ningún foro sin la palabra defensora de nuestro trabajo y nuestras convicciones. Cada banca que se juega en estas Elecciones es un puesto de lucha para seguir votando leyes a favor de la Patria y el Pueblo. Cada Diputado nacional o provincial, cada Legislador municipal que llevemos a las Legislaturas resultará la garantía para continuar transformando esta Patria, que hace apenas unos años, 10 nomás, parecía hundirse para siempre. No hay que perder ni una banca y si ganamos algunas más, mejor. Necesitamos batallar en la tierra para triunfar en el cielo de los sueños.
Por estos días también se decide la suerte de un sueño que hecho Ley aún no ha podido ponerse en marcha en toda su dimensión. Vuelvo a Marechal cuando harto del destrato y el ninguneo de la cultura oficial le escribía a su amigo Arturo Jauretche “hasta cuándo mis compatriotas me seguirán meando en la cabeza.” Eran tiempos de Medios exclusivos y excluyentes. Esos que aún en tiempos más lejanos dirían del Martín Fierro del grandioso José Hernández que no era más que un poema gauchesco sin demasiado valor literario. La Ley de Medios no viene a cerrar la boca de nadie, por experiencia propia no queremos que nadie padezca lo que padecimos, sólo quiere que todas las bocas tengan un lugar donde decir lo suyo. Sólo queremos cancha y en ella se verán los pingos. Entonces compañeros, nada de aflojadas, es tiempo de militar, de salir a enamorar a cada vecino, a cada compañero de trabajo o estudio. Tenemos dos batallas por delante: no le fallemos ni a Don Leopoldo Marechal ni la Patria.

Escrito para Aluvión Popular en el Proyecto Nacional

notas

La violencia instaurada por los Medios de Comunicación

Published by:

El Juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Eugenio Raúl Zaffaroni, inauguró en la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Plata, la Maestría en Comunicación y Criminología. En ese marco, brindó una clase magistral para alumnos, graduados, profesores y público en general, sobre Criminología y Poder. El jurista estuvo acompañado por la Decana de esa Casa de Altos Estudios, Florencia Saintout, y por Azucena Racosta, Secretaria Académica de la Maestría.


por Eugenio Zaffaroni – Ministro de la Corte Suprema de Justicia

En la actualidad, estamos moviendo las piedras fundamentales en algo que es vital para la Comunicación pero creo que más aún para la Criminología. El Aparato Jurídico de cualquier país se integra con tres patas: las Leyes, la Doctrina y un Aparato Judicial. Esas tres patas se montan en determinados momentos de la historia para una sociedad que tiene una cierta distribución de la renta. El segmento hegemónico que se queda con la mayor parte de la renta es el encargado de juntar el Aparato, y en el momento en que se trata de distribuir la riqueza, empieza a sostener que el Aparato es neutro y entra entonces en conflicto con las nuevas tentativas de redistribución. Esto puede verse en la historia de Estados Unidos, con la crisis de Roosevelt en los años ´30, o en la Argentina de 1946. Son los accidentes que sufre ese Aparato.
Todo discurso político de poder, todo discurso punitivo estuvo siempre acompañado de alguna explicación que constituye lo que actualmente conocemos como Criminología. Los que se encargaron de darla no fueron los mismos a lo largo de la historia, por eso es difícil hablar de una Criminología, hoy se prefiere hablar de las “Crimonologías.” En este sentido, los primitivos Criminólogos fueron los Inquisidores, porque fueron los primeros que se ocuparon de la etiología de mal, de la forma de manifestarse el mal, de sus signos y las formas de combatirlo. Es decir, lo que hoy llamamos Procesal Penal, Penal, Penología y Criminalística. Todo eso lo hacían en unos hermosos libritos de la época donde se dedicaban alegremente a fritar mujeres por toda Europa. El poder punitivo resurge en el mundo contra las mujeres, aunque las feministas a veces no lo recuerden.
Ahora bien, ¿qué es el poder punitivo? No es el poder que hay en toda la sociedad. Hay algunas formas de coacción que son comunes a cualquier la sociedad, incluso pre-estatal. Es la coacción que frente a cualquier conflicto obliga a la reparación, obliga a la restitución, más o menos lo que hoy sería la Coacción Civil del Derecho Privado. Hay otra coacción que también existe en toda sociedad que es lo que se hace para detener un proceso lesivo que está en curso. Hoy se llama Coerción Directa, antes se llamaba Poder de Policía. Son dos modelos de coerción universales. El poder punitivo no es ninguna de estas dos formas, sino que es lo que justamente escapa a éstas dos. Es cuando el Señor, el Soberano, el Príncipe, la República, en un momento dice la “víctima soy yo”, “el damnificado soy yo” y el damnificado desaparece, a partir de ese momento deja de ser persona y comienza a ser un dato. Es decir, una de las dos partes del conflicto, el lesionado, desaparece y su lugar lo usurpa el Señor, el Príncipe, la República. Las otras formas de poder existieron siempre, ésta aparece en la historia porque toda sociedad tiene una tendencia en algún momento a hacerla surgir con una función política, con una función de poder. No es un modelo de solución del conflicto, porque la parte lesionada del conflicto se quedó fuera, no lo resuelve. Se trata por el contrario, de un acto de poder vertical que cumple la función política de jerarquizar la sociedad, de darle una forma piramidal, de Ejército, bien estratificada. Muchas veces tiene éxito, otras se frustra por razones históricas coyunturales.
Existe una forma de ejercicio del poder punitivo que nos marcó de cerca: la europea. En Europa se verticalizó la sociedad romana y un buen día entró en crisis porque esa estructura que jerarquiza, verticaliza y da poder, que configura la sociedad en forma de pirámide, la solidifica tanto que cuando varía el ambiente le saca flexibilidad para adaptarse a las nuevas condiciones. Así cae el Imperio Romano, pero antes colonizó casi a toda Europa debido a esa estructura vertical, porque cuando una sociedad se establece así coloniza a la de al lado. Pasaron entonces unos cuantos años en que el poder punitivo había desaparecido. Sin embargo, con la decadencia del Feudalismo, el Príncipe de nuevo descubre que es un buen negocio enunciar “la víctima soy yo” y comienza otra vez a verticalizarse la sociedad europea y nos colonizan. Y sucede lo mismo que con el Imperio Romano: las potencias marítimas peninsulares ibéricas que nos colonizan, se inmovilizan tanto en su estructura que con los cambios que impone la Revolución Industrial en el siglo XVIII, no pueden adaptarse y caen. Entonces, la hegemonía europea pasa de las potencias marítimas al Centro y Norte de Europa. A lo largo de todo este proceso, el poder punitivo fue racionalizado: primero, por los demonólogos en la época de la Inquisición. Después de la Revolución Industrial, con la lucha de clases entre la burguesía que surgía, la nobleza y el clero. Esa burguesía que estaba asumiendo debía contener el poder de la clase hegemónica, y, entonces, durante el denominado Iluminismo convoca a Filósofos y Juristas que crean toda una terminología de reducción y contención del poder punitivo. Cuando la clase burguesa llega a la hegemonía, de nuevo surge toda una Criminología que dice “nosotros tenemos la hegemonía porque somos los mejores porque somos biológicamente superiores.” En esta historia entramos nosotros porque esta Criminología de los biológicamente superiores llega en los últimos años del siglo XIX a la Argentina cuando prácticamente toda América Latina habiendo salido de sus Guerras fratricidas después de la Independencia, y se organizaba como Repúblicas oligárquicas que habían malcopiado la Constitución de los Estados Unidos, pero cuya realidad era cuasi feudal. Era una realidad latifundista, en que las oligarquías regían las Repúblicas con total ausencia del protagonismo del Pueblo. La ideología que legitima el colonialismo es una ideología racista, spenceriana en aquel momento, la ideología oficial del Imperialismo británico. Tanto Gran Bretaña como Europa que tenían superioridad racial, como las minorías oligárquicas nuestras que eran avanzadas de la civilización y ya se estaban pareciendo al colonizador, tenían que tutelarnos al resto que seríamos los inferiores, hasta que aprendiéramos a ser igual a los otros. Todo esto está lleno de ridiculeces insólitas… Sin embargo, en 1910, 1915, 1920, en las Cátedras de nuestras Universidades se enseñaban estas cosas.

Esa Europa neocolonialista que practicaba genocidios incalificables -el genocidio del Congo de los Belgas, los genocidios en Sudáfrica de los alemanes, etc.-, todas esas masacres que se hicieron en aquel momento se legitimaban justamente en nombre de la civilización, se legitimaban en la razón de que los otros tenían la cabeza más chica, eran inferiores en términos biológicos. Es la Europa donde empiezan a concentrarse las poblaciones en las ciudades por el proceso de industrialización. La acumulación original de capital se centraliza en la ciudad que es un espacio chico donde se potencian todos los conflictos por la concentración de riqueza y de miseria. ¿Cómo se controla esto? Adoptando el mismo método con que se colonizaba. Una colonia es un gran campo de concentración, no es otra cosa. El cartel en la puerta de Auschwitz, “El trabajo libera”, se puede poner en cualquier colonia: trabajen, que así les va a crecer la cabeza, se van a liberar y van a ser igual que nosotros. Colonizar es ocupar policialmente el territorio, por eso no hay guerras coloniales sólo hay guerras de Independencia, las ocupaciones son policiales.
Cuando se concentran los marginados en las grandes ciudades y generan los conflictos sociales, se trae la técnica de la colonia y aparece una institución nueva: la Policía, que tiene aproximadamente 200 años como la pena privativa de la libertad, como la cárcel. Esta nueva institución va cobrando poder pero, ¿por qué se la trae y cómo se la teoriza? Acá entran los Criminólogos en el sentido más moderno, porque empiezan a observar que los marginados que se concentraban alrededor de los centros ciudadanos se parecían a los colonizados, eran biológicamente inferiores: en la parte más noble del tejido humano, de vez en cuando por algún accidente biológico nacía alguna célula que tenía las características de las células inferiores, es decir, negroide, africanoide, mongoloide. Allí comienzan a describir a los delincuentes como parecidos a los salvajes: no tienen moral, andan desnudos, no tienen sentido de la propiedad, tienen hipo sensibilidad al dolor, etc. Son delincuentes natos justamente porque tienen deformidades ya que la ontogenia resulta filogenia, entonces, en el seno materno donde se desarrolla todo el curso de la vida humana del planeta y culmina el curso filogenético algo falla y se quedan como los colonizados. Es una cosa regresiva, atávica pero es así. ¿Cómo se los controla? De la misma manera que se controla a los colonizados. Entonces, fabrican la Policía primero en Francia y más tardíamente en Inglaterra.
Esta institución va cobrando poder pero no posee discurso y poder sin discurso no va. Entonces, existía una Corporación que tenía discurso pero no tenía poder y desde hacía rato tenía ganas de conquistarlo: los médicos. Empieza aquí la época de los Criminólogos médicos, los médicos forenses, los Institutos de Criminología, los diagnósticos, la Clínica criminológica, la diversificación de los delincuentes con los médicos legistas. Se fundan nuestras Criminologías nacionales: José Ingenieros en Argentina, en Brasil, Raimundo Nina Rodríguez. Este es el último momento en que el discurso académico criminológico coincide con la ideología de nuestras elites, a partir de allí se empiezan a producir confusiones diferentes. Llega un momento en que todo este racismo que da lugar al llamado peligrosismo, en definitiva, una ideología resultante de una alianza médico policial, entra en crisis. La ideología positivista decae en el mundo, pierde base científica y filosófica.
Llega la segunda Guerra Mundial y todo el mundo intenta tomar distancia de lo que había pasado. Primer Congreso de Criminología, París, 1950: la Criminología se queda sin base biologista y empieza a disolverse en discurso, no sabe para dónde apuntar. Y llegamos a la década de 1960. Del otro lado del Atlántico, en Estados Unidos, hay algunos Sociólogos que empiezan a señalarnos que no nos hemos ocupado de las causas del delito, que no nos hemos ocupado del Aparato punitivo. Entonces, introducen un análisis del funcionamiento del Sistema Penal en base a una metodología interaccionista, fenomenológica que logra deslegitimar el discurso de base dogmática penal. Empiezan a observar la forma de selección de la criminalización primaria y de las Agencias de criminalización secundaria -Policía, Judicial, Penitenciaria- y dan cuenta de que seleccionan en función de estereotipos. Los estereotipos son los que crea la Comunicación en función de los prejuicios más negativos que tiene una sociedad. Entonces, se selecciona por estereotipo, esto es, se selecciona en principio, conforme a vulnerabilidad y la vulnerabilidad se condiciona de varios modos pero dentro de una determinada capa social que tiene mayor vulnerabilidad. Es decir, el estereotipo es lo que lleva un sujeto con cara de, que habla como, se viste como, se peina como y, además, roba. Pero roba con un uniforme de ladrón, ese es el problema, va vestido de ladrón. Todos conocemos lo que son los estereotipos: estamos parados en la esquina esperando el colectivo, viene un pibe de gorrita, son las dos de la mañana, nos ponemos en posición de alerta, primer movimiento y sacamos un mango. Si el pibe viene y saca una flor, pensamos a éste qué le pasa… si está el pibe de gorrita y va cruzando una señora con un bastoncito, decimos: le va a robar la cartera. Esto de los estereotipos funciona siempre, es un efecto interactivo. Hay roles positivos y negativos que se reparten en una sociedad. Un rol negativo es el del delincuente. Pero cuidado, que el estereotipo no es una cosa externa porque socialmente demandamos roles y si no se responde al rol nos enojamos, entonces, el sujeto va ir proyectando y respondiendo a la demanda del rol.

La prisión es una máquina que tiene una jerarquía, una organización interna, se integra a un grupo y dentro del grupo conforme a la especialidad, y también tiene demandas de rol a las que tiene que responder conforme a las pautas de cada grupo. Es una máquina que por más que la mejoremos -y hay que trabajar en los niveles de estigmatización-, lo cierto es que en gran medida es condicionante y fijadora de roles, no le podemos eliminar esa característica estructural del todo. Tenemos que hacer el mayor esfuerzo para bajarla, pero hacerla desparece totalmente es casi imposible. Ahí uno de los riesgos de acusar de la cárcel, es decir, el riesgo enorme que existe es la función reproductiva por efecto de fijación del rol… En definitiva, si la población carcelaria, sacando un 20 porciento más o menos de psicópatas que hay, el resto que son delitos contra la propiedad o delitos de subsistencia, etc., si todos esos los soltamos a la calle sin que nadie se entere, en la sociedad no pasa nada. No pasa nada, sin embargo, seguiríamos siendo victimizados mediáticamente como ahora. Noto que es un número relativamente chico en una población de 40 millones. Sin embargo, lo tenemos ahí. Pero, ¿qué poder es ese? El poder de tener en prisión unos 70, 80, 100 mil, 120 mil ladrones, ¿eso es poder? Que pertenecen a los segmentos más carenciados de la sociedad, ¿eso es poder? No, ese no es el poder punitivo, esa no es la verdadera dimensión política del poder punitivo y esto lo aclaró perfectamente Michel Foucault. La dimensión política del poder punitivo no está en la faz represiva de criminalizar a estos vulnerables, está en su faz configuradora o positiva. Está en la vigilancia que se ejerce con tal pretexto sobre todos los que estamos sueltos. Esa es la dimensión política del poder punitivo. Eso es lo que tiene importancia política, esa es la configuración cotidiana, propositiva. El poder de vigilancia es el poder cuya capacidad tecnológica hoy se ha potenciado hasta límites que son absolutamente inconcebibles. Riámonos de la KGB, de la Gestapo, eran un Jardín de Infantes comparados con el control que existe en este momento. Sin embargo, si miramos al mundo, la prisionalización aumenta en casi todos lados, se incrementa notoriamente. ¿Por qué? Porque esto no es realmente el verdadero ejercicio del poder. Y aquí es donde la Comunicación cumple un papel fundamental. Hay un discurso jurídico y hay un discurso académico de la Criminología pero además, hay una Criminología mediática. El discurso de la Academia es uno pero el discurso de los Medios es otro y la gente vive conforme a la construcción de realidad que le imprimen los Medios. ¿Y cómo funciona hoy en el mundo esa Criminología mediática? Cada país le agrega algún dato folklórico pero estamos demasiado globalizados. Efectivamente, hay un fenómeno muy grave que pone en riesgo vidas humanas por un lado y que pone en riesgo al Estado por el otro.
El país hegemónico hoy en cuanto a Comunicación es Estados Unidos. Estados Unidos era un país más o menos normal hasta hace unos treinta y tantos años en cuanto a su Sistema Penal. Había desarrollado técnicas interesantes en medidas de temas no privativos de la Libertad, en la forma de controlar después de la Libertad condicional. Su índice de prisionalización desde 150 años antes no había variado mucho y, de repente, a fines de los ´70 y principios de los ´80 se dispara. Hasta entonces la campeona de la prisionalización siempre había sido Rusia porque Siberia les salía barato. Estados Unidos pasó a Rusia, siguió de largo, 2 millones y medio de presos, obviamente, que implica una inversión muy grande, se calcula algo así como 200 millones de dólares por año, supera el peor momento de nuestra Deuda Externa, eso se gasta por año en mantener el Sistema Penal. Además, para tener tantos presos se necesita demanda de servicios con lo cual esto se convierte en una clave para regular el empleo- desempleo. Curiosamente, por primera vez en su historia a partir del año 1989 más del 50 % de su población penal es afroamericana, de cada tres hombres negros entre 20 y 30 años, uno está preso, supongo que el resto serán latinos, no tengo el dato, es una hipótesis nomás. Pero, ¿cómo se produce este fenómeno? Estados Unidos por los años ´30 estableció un Modelo de Estado de Bienestar planeado sobre una economía keinessiana, que trataba de incorporar a la población marginada de la ciudadanía real en tiempos de crisis. Ese modelo es Roosevelt, que es como Perón en Argentina. Se mantuvo hasta la llegada del Modelo Reagan/ Bush, que dicen “acá no se incorpora más a nadie, el que se quedó afuera se queda afuera y lo vamos a controlar a garrotazos.” El ciudadano medio del Modelo Roosevelt era el ciudadano trabajador. El del modelo Reagan Bush es el ciudadano víctima. Empiezan a fabricar la víctima héroe que no es cualquier víctima sino una víctima que se selecciona y se la muestra por el lado del Ministerio Público. La víctima debe estar en condiciones de causar cierta empatía, ser histriónica, medio histérica. Se le hace decir todo aquello que el comunicador social no se anima a decir, hasta que la víctima, como se le interrumpe el proceso de la elaboración del duelo, se le sigue acumulando culpa irracional que trata de extrovertirla, llega un momento en que las barbaridades que dice se hacen intolerables, entonces, ya no es mostrable, la tiran y buscan otra. El daño psíquico que le hacen a la víctima interrumpiéndole el proceso de elaboración del duelo es incalificable, un proceso de extrema crueldad. Van creando esto y ese discurso se traduce en un punitivismo a través del reclamo de leyes penales cada vez más duras, de mayores penas, mayores atribuciones a la Policía, las Policías se van autonomizando cada vez más. La autonomización policial, significa que hay ámbitos de recaudación autónoma por un lado y ámbitos de ejercicio del poder independientes de la autoridad política, por el otro. Empiezan a dar golpes de Estado las Policías en África y en América Latina. A medida que una Policía se autonomiza se vuelve más ineficaz para la prevención real del delito. Por otro lado, esta exigencia de leyes cada vez más represivas va destruyendo los límites al poder punitivo que tiene que tener el Estado de Derecho. La propaganda de esta empresa la hacen los Medios y, fundamentalmente, la Televisión a través de la demostración de una realidad. Muestra siempre un pedazo de cine continuado que no se maneja con racionalidad ideológica. Los autoritarismos de entreguerras –fascismo, stalinismo, nazismo- eran perversos pero eran creativos como el Demonio, tenían palabras militares, bandera, música, marchas, uniformes… Estos no tienen nada, no tienen discurso, son pura publicidad que impacta en lo emocional. Y es muy difícil destruir el impacto emocional porque normalmente cuando uno llega a la casa cansado y encuentra el zapping en la televisión no tiene ganas de pensar un discurso. No se necesita mentir, inventar, a veces se inventa, se miente pero no es necesario mentir. Depende de cómo se muestre, qué se muestre, hasta qué punto se explote la morbosidad y la frecuencia, los minutos de televisión que se le dediquen. En este punto, son absolutamente inofensivos los Canales especializados y las publicaciones especializadas, esas existieron siempre con una tribuna fija que no altera nada. Los servicios normales de noticias sí, y el comunicador social que explota el sentimiento de la población emocionalmente sí, son técnicas norteamericanas que se extienden por todo el mundo. Y hay otra que pasa desapercibida pero también contribuye a hacernos parte del delito psicológico de pensar que la solución a todo conflicto tiene que ser violenta y punitiva: es la comunicación de entretenimientos. Si uno hace zapping, va a observar en una hora más homicidios que los que se cometen en todo el año en la Ciudad y, además, de una crueldad que no responde casi nunca a la realidad. Hay una banalización del espectáculo y una estructura de la comunicación de entretenimientos que se reitera siempre: hay una serie donde el protagonista rompe la norma que le dicta algún funcionario -el Juez, el Fiscal, el Jefe policial- y gracias a que incumple la norma procesal de prudencia salva a la muchachita. Esto parece inocente pero desde etapas prematuras de la vida se va a ir proyectando como modelo único de solución del conflicto. La misma serie se dobla y se pasa en todo el mundo, es decir, las mismas técnicas se van reproduciendo. El riesgo que tiene esto, por un lado, es la destrucción de los límites del Estado de Derecho pero, además, la pérdida de vidas humanas, no sólo por la violencia que alcanza un Sistema Penal con estas características –hay muertes anunciadas- sino porque si el discurso académico no refleja la realidad porque el poder lo manipula y el discurso mediático también es manipulado por el poder, entonces la realidad no existe. Yo no sé lo que es la realidad pero sí sé que uno puede aproximarse un poco a la realidad de la violencia haciendo algo que hasta me lo aconsejaría mi abuelita, me diría “contá los muertos.” Cuando me pongo a contar cadáveres me encuentro con que hay una punta de muertos que no hablan, que no dicen nada y ni siquiera dicen que están muertos. Efectivamente, cuando me pongo a contar cadáveres me pregunto, ¿quién cometió el mayor número de homicidios en el siglo XX? Los Estados. Superan de lejos a la totalidad de los homicidios de iniciativa privada. No me refiero a los homicidios de los Estados en la guerra, dejemos de lado ese problema. Me refiero a los homicidios de personas indefensas, es decir, masacres o genocidios. Si sumamos Armenia, el Congo, las hambrunas de Rusia, Camboya, Sudán, el Holocausto, de cada 50 humanos que caminaron sobre la superficie del Planeta en el siglo pasado, uno se lo cargó el Estado. Y particularmente, Agencias del poder delictivo: la KGB era una Policía, la Gestapo era una Policía, los turcos soltaron a los presos que tenían en las cárceles para que mataran armenios. En África, la Policía incentivando. En Camboya, la Policía se cargó una cuarta parte de la población, 2 millones y medio. Sociológicamente hablando, criminológicamente hablando, este poder punitivo tiene un potencial genocida, tiene un potencial masacrador. Por eso, cuando digo que se pone en peligro el Estado de Derecho no me estoy refiriendo al principio jurídico, sino a la contención del poder punitivo del Estado que tiene que haber para que no acabemos en un genocidio que no siempre se produce de golpe sino también por goteo.
Este poder punitivo que corre el riego de convertirse en masacrador no está interesado por prevenir muertes. Esta construcción de realidad mediática tampoco, construye una realidad y no le importa cuál sea la realidad. El discurso mediático es exactamente el mismo desde México hasta Tierra del Fuego. En México tienen en tres años 60.000 muertos, castrados, decapitados, etc. En Centro América tenemos las maras, en Venezuela parece que se le escapó el índice de homicidios, Colombia va bajando, Brasil anda alto, en un veintipico. Nosotros tenemos el índice más bajo, cercano a los índices canadienses que son los más bajos del mundo, pero el discurso es el mismo. Más aún, ¿le importa a alguien hacer Criminología de campo enserio con un objetivo preventivo? ¿Le importa estudiar la realidad de lo que pasa con la violencia? Hay muy poca inversión en esto es nuestra Región. Si no se invierte en averiguar lo que sucede con nuestra violencia, ¿la podemos prevenir? ¿Alguien acaso puede prevenir lo que no conoce? La lógica me indicaría que no, con lo cual, llego a la terrible conclusión de que todo esto es un manejo de poder que invoca determinados bienes jurídicos y. fundamentalmente, la vida humana pero detrás de este manejo de poder se desentiende de la vida humana. Cada uno sabe en su actividad lo que hace, decide, elije. Pero, creo que en la actividad comunicacional lo importante es saber lo que se hace, después la elección corre por la conciencia de cada uno.

 

Nota publicada en la ediciòn impresa de Aluviòn Popular y en http://aluvionpopular.com.ar/?p=17987

 

noticias

Los mensajes y las interpretaciones de La Noche de los Lápices

Published by:

Juan Manuel Ayude
Durante muchos años se le quiso hacer creer a la totalidad del Pueblo argentino, que la llamada “Noche de los Lápices” ocurrida el 16 de septiembre del año 1976 en plena Dictadura genocida, ocurrió únicamente porque un par de jóvenes quisieron recuperar un derecho como el del boleto estudiantil.

Esto es una falacia inventada principalmente por los mismos creadores de la historia oficial que empuja a nuestro Pueblo a creer mentiras para favorecer intereses históricamente dominantes y de la llamada “Teoría de los dos Demonios”, que decía que el “primer Demonio” había sido la Juventud por haberse animado a combatir a la oligarquía, y el “segundo Demonio” habían sido los militares llegados “inevitablemente” para evitar que los jóvenes continúen cometiendo sus “crímenes.”
En el contexto actual, que nos permite no ya revisar sino directamente reescribir la historia usando las claves de las clases oprimidas, podemos refutar fácilmente esa mentira. Los jóvenes que lucharon ese día, haciéndole frente a las fuerzas de choque del Imperialismo y la oligarquía para poder tener como un derecho adquirido al boleto estudiantil, lo hacían desde un marco global de lucha por una sociedad igualitaria y no como lucha aislada, casi como “una necesidad del bolsillo.” Haciendo creer este hecho como aislado, incurriríamos en el error de hacerle el juego a la historia dominante que vacía astutamente de contenido las grandes gestas históricas de modo que no puedan verse en su verdadera magnitud porque si eso pasara podría servir de ejemplo para nuestros jóvenes.
Pero muy a pesar de la oligarquía, los jóvenes ya no creemos sus historias: esta generación creció con la irresoluta vocación y convicción de tomar el legado de aquellos compañeros de la UES de los años ´70 de tener una educación de calidad y liberadora en una Patria Justa, Libre y Soberana. En cada medida que favorece a un Proyecto de Liberación Nacional y Latinoamericana está el espíritu de aquellos compañeros de la UES y de cada uno de los 30.000 compañeros que ya no están. Por eso, en este mes los militantes reiteramos nuestro pedido de que siga este proceso de Memoria, Verdad y Justicia para que se pene a los culpables de todas las atrocidades cometidas por la Dictadura genocida y antipatria. Sólo así, y con la continuidad de este Proyecto Nacional y Popular, se hará justicia con Claudio de Acha, María Clara Ciocchini, María Claudia Falcone, Francisco López Muntaner, Daniel Racero, Horacio Ungaro, y con todos los sueños que se fueron con ellos pero que hoy nosotros intentamos continuar.

noticias

Hoy gritamos fuerte viva Perón y lo hacemos con alegría

Published by:

Por Santiago Carreras
El cielo sabe. Un día como hoy, tan gris o peor, pero de 1955, mediante un golpe de estado se interrumpía el proceso democrático en nuestro país.

Se ponía freno a la revolución, se comenzaba a perpetrar el peor de los crímenes contra el pueblo argentino: fusilarnos hasta el silencio. No querían ni que lo nombremos. Comenzaba así también la resistencia a la Fusiladora, a la proscripción. Empezaba a organizarse la comunidad, para hacer escuchar bien fuerte su grito…
Quiso el capricho de calendario que otro 16 de septiembre sufriéramos nuevamente. Esta vez la dictadura cívico-militar de 1976 se llevó a jóvenes brillantes, militantes políticos y comprometidos para torturarlos y hacerlos desaparecer.
De días grises está hecha la historia, de gotas que nos caen hasta penetrarnos el alma pero sin ahogar nuestra memoria. Hoy recordamos para no repetir. Hoy gritamos fuerte viva Perón y lo hacemos con alegría. Hoy nuestros mártires de La Noche de los Lápices son bandera de una militancia organizada, comprometida, formada y convencida que solo en un proyecto nacional e inclusivo lograremos alcanzar la justicia social en nuestra Patria. Hoy llueve, como si el cielo supiese que todavía nos duele. Pero no podrán detener tanto fuego.

noticias

Que todos seamos Susana

Published by:

Por Julieta Iriarte
Un día que pudo haber sido otro de los tantos más comunes de su vida, la transformó íntegramente y a la sociedad argentina aún más. Tal vez ya había encontrado su objetivo en la vida, y a lo mejor lo había cumplido también, pero el destino la sorprendió y le jugó una mala pasada.
La fuerza y lucha de Susana Trimarco, madre de Marita Verón quien fue secuestrada en 2002 por una red de trata de personas, se materializó nuevamente al entregársele el Premio Rodolfo Walsh a la Comunicación Popular por parte de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de La Plata.
A partir del día en que su hija desapareció, Trimarco comenzó su búsqueda por todos los caminos posibles (e imposibles también). Conoció esos lugares que tienen “la lucecita roja en la puerta” , descubrió una realidad que le era ajena y decidió ponerse al hombro no sólo lo sucedido con su hija sino lo que padecen miles de chicas a lo largo y ancho del país.
Acompañada por la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, y la decana de la institución Florencia Saintout, Trimarco dijo “una lucha termina y comienza otra todos los días, por eso lucharé contra las mafias, por democratizar la Justicia y para que no existan más víctimas como mi hija”.
Las amenazas de muerte, los oídos sordos (y hasta cómplices) de ciertos funcionarios, las preguntas de su nieta Micaela sobre dónde estaba su mama no la tumbaron, la llenaron de fuerza y valentía para la lucha del día. Así, logró rescatar a más de un centenar de mujeres que se encontraban privadas ilegítimamente de su libertad a quienes les brindó su casa, la cama de sus hijos y la ropa de Marita.
1185956_162854923918602_441426308_nCon la llegada a la presidencia de Néstor Kirchner, Susana Trimarco encontró la ayuda Estatal y moral que tanto necesitaba. “Néstor Kirchner fue el primer presidente que me ayudó, me escuchó y ahora Cristina me brinda su apoyo en la lucha por mi causa y por la de tantas chicas más. Por eso llevaré siempre a Néstor en mi corazón”. Durante el primer gobierno kirchnerista se abrió la Fundación María de los Ángeles donde se reciben denuncias y se asiste a las víctimas de trata, e inauguró el primer refugio especializado para víctimas de trata. “Con el dolor de las madres no hago política” le dijo una vez Néstor kirchner.
Fue a partir del año 2008 que tanto la sociedad como la justicia comenzaron a debatir y reflexionar acerca de la trata de personas al punto de sancionarse una ley respecto a esta situación que no conoce límites territoriales. A nivel nacional y provincial, cada ministerio tiene una dependencia especializada en este delito.
Trimarco señaló que lo que se hizo fue mucho pero todavía falta y destacó que “el próximo paso es trabajar para que no haya clientes, hablar más de la temática y ver la manera justa de que quienes consumen no vayan a los prostíbulos”. Una tarea sumamente difícil que, gracias a Dios (como ella agradece), no llevará adelante sola ya que a lo largo de estos años de intensa búsqueda aparecieron muchas personas que le alivianaron la carga que lleva sobre sus hombros.
Ella incentiva a no callar, a no tenerle miedo a nadie; sus ojos son el fiel reflejo de que su labor es a sol y a sombra. Mucho se escribe y se dice de Susana Trimarco y Marita Verón. Muchos hablan sobre la trata de personas, otros prefieren no hablar. No son pocos los que son cómplices pero son más los que luchan por desenmascararlos. Se opina, bien y mal, a favor y en contra; se debate, se lucha, se cae y se vuelve a levantar. Cualquiera puede ser Marita pero no hace falta que pase nada para que todos seamos Susana.

noticias

Graciana Peñafort Colombi: “La libertad de expresión es la diversidad”

Published by:

Por Hugo Ruano
Graciana Peñafort fue la figura excluyente de la audiencia pública por la Ley de Medios realizada en La Corte. Redactó la Ley de Medios y trabajó codo a codo con Gabriel Mariotto y participó como representante del Estado nacional respondiendo los interrogantes del máximo tribunal porque conoce como pocos la redacción de los artículos de la Ley 26.522 de Servicios de Comunicación Audiovisual. En dialogo con Aluvión Popular y el Pulki, en radio Universidad AM 1390 nos brindó las expectativas.
Después de la audiencia expresó cuales son las expectativas y el balance de estas dos jornadas: “Yo creo que el balance es positivo en dos planos distintos de análisis. Por un lado me parece muy importante que se haya podido escuchar los argumentos porque hasta ahora era una discusión muy desigual entre el eslogan que decían que los canales iba a desaparecer con muy buena argumentación de derecho y análisis del mercado argentino en términos de concentración que eran invisibilizados por los medios concentrados, entonces una de las primeras cosas fue la visibilización del debate real, discutimos razones no discutimos eslogan en ese sentido a mi me pareció sumamente positivo. El segundo aspecto para resaltar, es que si la Corte tenía tantas inquietudes en buena hora convocó a las partes para tomar una decisión informada y con sus inquietudes saldadas. Esos aspectos fueron positivos porque, desde el punto de vista democrático, se visibilizó el debate público y desde el punto de vista jurídico porque va a permitir un fallo desde la información y no desde la suposición”.
Acerca de los argumentos de los abogados de Clarín dijo “son argumentos profundamente ideológicos que pretenden confundir libertad de expresión con rentabilidad. La libertad de expresión es la diversidad, de ninguna manera es la rentabilidad y por eso me pareció atinada la insistencia de la Corte de diferenciar sustentabilidad de rentabilidad. La sustentabilidad es donde uno puede desarrollar la actividad y la rentabilidad es la ganancia que ni siquiera, como explicó el economista del Estado, va a los usuarios. Entonces cuando tuvieron que explicar este argumento, cayó por su propio peso”
Las preguntas de la Corte fueron muchas, con respecto a esto Graciana dijo “Yo creo que la Corte demostró que habían hecho un estudio exhaustivo del expediente. No me parecieron preguntas improvisadas. Todos somos hombres sociales, seres sociales y no podemos estar aislados del contexto, digo uno ve televisión, ve publicidad, ve programas, escucha radio, entonces no pueden estar exentos de esto las personas que están en el Estado. Yo prefiero jueces que estén inmersos en la realidad social porque esos son los que pueden impartir justicia, así que si había alguna instancia de prejuicios creo que el Estado supo decir que esta pregunta no es jurídica sino de otro corte, es decir, reformulémosla y respondamos en el sentido correcto. La ley no es contra un grupo sino que es contra la concentración en el sentido audiovisual porque vulnera la libertad de expresión”
La doctora formuló cual debe ser el rol de los medios en una sociedad “La figura democrática de representación de la suma de miedo, expectativas, deseos, esperanzas es la política, no los medios de comunicación. Los medios de comunicación deben de ser el reflejo de la política en términos de debate público, es decir me parece valido que haya medios que estén a favor de una determinada política y medios que estén absolutamente en contra, pero esos medios ponen en debate público y después los ciudadanos en forma individual elegimos que ver o escuchar”
A raíz de las declaraciones de los abogados del Grupo Clarín que dijeron que si es adverso el fallo de la Corte iban a llevar a instancia supranacionales, con respecto a esto afirmó “En este caso, hay dos cosas, es bueno para la argentina estar inserto en el sistema interamericano de DDHH porque permite un control convencional de los organismos supranacionales del cumplimiento de los DDHH de la región. El grupo Clarín como cualquier ser humano puede llegar a esa instancia y la verdad que es muy bueno porque no solo nos hemos interesado en la letra del sistema interamericano sino además en sus interpretaciones, en su espíritu mas profundo al momento de elaborar esta Ley, digo la Ley esta cruzada, no sólo en referencia sino en textos completos, es decir que el sistema interamericano no puede estar en contra de lo que ha escrito. Creo que es mas difícil explicar en un país como la argentina acostumbrado con la concentración mediática lo malo que es esto para la democracia que al sistema interamericano que vienen dando larguísimas batallas para la desconcentración mediática”
Y culminó “a mi me tocó ser la vocera de un grupo de compañeros encabezados por Gabriel Mariotto que hicieron que esta Ley fuera posible”
Siquieren escuchar la entrevista completa pueden entrar a http://elpulki.blogspot.com.ar/2013/09/graciana-penafort-colombi-la-libertad.html

notas

Por la plena vigencia de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual

Published by:

por Luciano Torres
Una multitudinaria movilización abrazó la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual y exigió frente al Palacio de Tribunales que la Corte Suprema resuelva el conflicto iniciado por el Grupo Clarín, que impide hace ya cuatro años que la norma pueda aplicarse integralmente a lo largo y ancho del territorio nacional.

El ex Titular del Afsca y Vicegobernador de la Provincia de Buenos Aires, Gabriel Mariotto, expresó en este acto: “Esperamos con gran optimismo la resolución de la Corte y ponemos toda la esperanza porque hemos trabajado con mucha militancia este eje comunicacional en todo el país, hemos mirado las leyes del mundo, los preceptos de los Organismos de Derechos Humanos y estamos convencidos de su constitucionalidad”, y consideró “inadmisible” que siga postergándose la aplicación de la Ley: “Hoy vivimos en Democracia y con esta Ley ampliamos Derechos, así que esperamos un Fallo contundente”, dijo antes de celebrar “esta maravillosa manifestación después de años de luchar por una Ley de Comunicación de la Democracia.”
Por eso, una vez más la sociedad en su conjunto pone el hombro para acompañar y pedir el cumplimiento de una Ley que puso el nuevo ordenamiento que deben tener los Medios de comunicación en nuestro país. El Proyecto de Ley de Medios nació como una demanda popular para democratizar las comunicaciones masivas a través del diálogo fecundo que las Organizaciones populares mantienen con las mejores tradiciones liberadoras de nuestra historia nacional. Su aprobación en Octubre del año 2009, fue el resultado de la voluntad política y el coraje de una Presidenta para enfrentar a las Corporaciones que monopolizaban la información y la construcción del sentido. La sanción de la Ley expresó la construcción de una correlación de fuerzas que permitió ganar una disputa discursiva que puso al descubierto la supuesta “neutralidad” de los Medios, que lo que aparecía en las pantallas de TV y en el sonido de las Radios no era un fiel reflejo de la realidad sino, el resultado de un proceso de elaboración donde se seleccionan temas y motivos y se eligen determinadas fuentes para tratarlos. No hay transparencia entre los productos mediáticos y aquello que designamos como “la realidad.” La construcción de cualquier texto, mediático o no, presupone un proceso de recorte de lo real. De qué hablar y mostrar y de qué no, qué colocar en el primer plano y qué en el fondo. Qué fuentes se utilizan para elaborar el relato y cuáles se dejan de lado. Ese proceso es el resultado de una selección donde se ponen en juego concepciones del mundo, puntos de vista y, sobre todo, intereses económicos y políticos.
En la actualidad, la aplicación de la Ley en todos sus artículos está trabada por un Grupo que no acepta que en una sociedad más justa no debe tener mas privilegios. Entonces, primero decía que “se van a meter con lo que queremos decir.” Lo que busca la Ley es enfrentar las tendencias monopólicas, la concentración mediática, las posiciones dominantes y sobre ese sentido, la Ley sí opina acerca de lo que un Grupo o un Titular de Medios puede tener, la cantidad de Licencias que puede tener, pero bajo ningún punto de vista en la programación. Después, empezaron a meter el temor a los trabajadores de que iban a perder sus fuentes laborales si se aplicaba la Ley integralmente. También esto es falso porque la aplicación de la Ley va a cuidar una por una las fuentes de trabajo y, además, va a generar nuevas opciones laborales porque promueve más inversión y más trabajo. Después, argumentaron que la Ley iba a cercenar la libertad de expresión y quedó claro que era todo lo contrario. El año pasado, el Relator Especial de Naciones Unidas (ONU) para la Libertad de Opinión y de Expresión, Frank LaRue, puso nuestra Ley de ejemplo como una Ley a favor de la libertad de expresión y la lanzó como modelo para otros lugares del mundo.
Sucede que se habla de un Grupo porque es el único que no quiere cumplirla pero insisto: la Ley no es para un Grupo, para otro, sino para todos. Vamos teniendo que dar cuenta de los relatos que genera este Grupo con el único objetivo de no cumplir la Ley y mantener su situación de privilegio.

Cuando la única ley fue la del mercado, millones quedaron por fuera de la vida vivible, excluidos como desperdicios humanos, justificado todo esto bajo la idea de los “daños colaterales” de la reproducción del capital. Los daños colaterales del mercado como ley, fueron el hambre, la miseria, la mortalidad infantil. El arsenal lingüístico del derecho a elegir restringido se corresponde con la negación de la responsabilidad al reconocimiento del otro como sujeto de Derecho y no como simple consumidor de un mercado que ofrece lo que le es rentable ofrecer. Lo demás afuera. Clarín habla de libertad como libertad de consumir, de comprar. Esta es una libertad falsa: no hay ética, no hay responsabilidad, no hay Derecho en ella. Sólo podemos comprar lo que el mercado ofrece. El grupo sabe que los públicos se hacen, que no nacen. Y que ellos han participado monopólicamente durante años en la construcción de públicos a los que les ofrecieron besos, shows, música, entretenimiento, caras con las que crecimos y la mayoría de las veces quisimos y queremos. Caras que tuvieron como única posibilidad de trabajo esos canales y esas pantallas. Y utilizan esa historia de conformación de los públicos para generar complicidad, pero lo hacen como siempre de una manera cuasi mafiosa, extorsionándonos y ocultando la verdad: ellos tienen esos besos porque se los robaron, se los apropiaron, y con ello, hicieron negocios para sus propios beneficios. Nada les importa de los públicos, porque para ellos los públicos sólo son consumidores.

Es crucial la democratización de la información. En ninguna parte del mundo existe una Ley tan retrógrada como la que había acá en la Argentina. Pongamos ejemplos: en Estados Unidos, el dueño de un Canal no puede ser dueño de un Diario, hay una clara tendencia para que no exista la concentración mediática y lo mismo sucede en gran parte de los países europeos, con excepción de Italia, donde Berlusconi tiene un monopolio virtual de la información. En la Argentina, se está avanzando en el proceso de la democratización del acceso a la información y la difusión de la misma y éste proceso requería de un cambio radical y el cambio radical es la nueva Ley de Medios. Es un momento muy importante porque es un paso a favor de mejorar la calidad de la Democracia. Necesitamos esta Ley para dejar atrás una norma oscura de la Dictadura: democratizar la palabra es absolutamente necesario para poder expresar lo plural, diverso, multicolor de nuestro Pueblo. Es una Ley profundamente comprometida con la libertad de expresión, con el derecho a la información y, entonces, estamos dando un paso como sociedad muy importante porque además es una Ley debatida, discutida durante muchos años, una Ley que tuvo una amplia mayoría en el Parlamento nacional. Es un momento muy importante, histórico, porque produce grandes transformaciones en la comunicación audiovisual y se da al calor de las grandes transformaciones que está viviendo la Argentina. No podemos permitir que tanto esfuerzo y tantos avances terminen con una derrota. A partir de esa fecha, cuando expire la suspensión Cautelar realizada por el Grupo Clarín sobre el artículo 161, será de especial importancia no sólo la decisión y determinación del Estado Nacional sino también, la expresión de las fuerzas sociales organizadas. Se trata de la construcción de dos tipos de hegemonías y no de una con exclusión de la otra. De lo contrario, ocurren situaciones históricas como la de 2001, cuando gran parte de la sociedad pedía ‘que se vayan todos’, mientras se afianzaba la creencia en la organización horizontal y en la toma de decisiones directamente por parte de los ciudadanos. Aquella potencia social durante la crisis no halló los canales institucionales desde los cuales poder construir poder y realizar un proyecto político perdurable en el tiempo. La Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual es profundamente democrática.

La Decana de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Plata y candidata a Concejal, Florencia Saintout, dijo tener “la certeza de que, finalmente, se va a aplicar de manera plena la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.” Los intereses monopólicos “han demostrado ser muy fuertes, pero tarde o temprano van a ser vencidos.”. En este sentido, explicó que la medida Cautelar que dejó en suspenso la aplicación de los artículos 45 y 161 de la norma, que regulan las transferencias de Licencias y los plazos de aplicación, significa que “la Corporación ha encontrado trampas para que la voluntad popular no se lleve adelante.” La Corte deberá asumir la responsabilidad y tomar la decisión correspondiente, que no es otra que fallar a favor de la constitucionalidad de los artículos que están frenados. No puede demandar cuatro años por una medida Cautelar, esto también hay que tenerlo presente, la Cautelar refiere a dos artículos de la Ley, uno que le pone un tope de Licencias que puede tener cada dueño de Medios y otro que establece el plazo de un año para cumplirla. Además, ya la Corte expresó que no se trataba de un ataque a la libertad de expresión. La pregunta es entonces ¿por qué tanta demora? Puede ser porque esta Corte Suprema salvo honrosas excepciones, como el caso de Eugenio Zaffaroni, no puede alejarse de sus intereses corporativos y no esté a la altura de la historia. Ojalá me equivoque.

Escrito para Aluvión Popular

noticias

“Voy a seguir buscando a mi hija hasta las últimas consecuencias”

Published by:

Una de las caras más importantes de la lucha contra la trata de personas. Susana Trimarco, cuya hija, María de los Ángeles (“Marita”) Verón fue secuestrada por una banda de trata de mujeres y sometida a la explotación sexual, a once años de aquel momento su destino es desconocido. La palabra de una luchadora
Por Silvina Perugino y Luciano Torres
Aluvión Popular.- Susana, en principio queremos preguntarte después de la vergonzosa sentencia de diciembre de 2012, ¿En qué estado encuentra la causa hoy, se desmembraron otras investigaciones a partir de las declaraciones de las víctimas? ¿En qué estado se encuentran las apelaciones?
Susana Trimarco: Todavía estamos la espera de que Casación comience con el proceso de apelación. Eso debería ocurrir en breve. Otro tema es el del juicio político, que la Legislatura había hecho lugar al Jury de enjuiciamiento pero una cautelar de uno de los jueces acusados lo frenó. No ha habido nuevas investigaciones relacionadas a las declaraciones de las víctimas en el juicio.
AP.- Usted apoya los proyectos de democratización de la justicia, impulsadas en Nación por la Presidenta y en la provincia de Buenos Aires por Gabriel Mariotto. ¿Cree que esta democratización puede ayudar en que casos similares puedan resolverse y a terminar con la connivencia entre la justicia y el delito?
ST: Si claro. El acceso a la justicia no debería ser trabajoso y el familiar de una víctima no debería pasar por lo que pasé yo o mi nieta Micaela. Es importante que esas autoridades no se sientan que tiene el poder eterno y que si no hacen bien su trabajo, no permanecerán en sus puestos de manera indefinida sin importar su desempeño.
AP.- ¿Cuál es la situación de las chicas que declararon en el juicio como testigos?
ST: Algunas de ellas están esperando que comiencen los juicios, pero viendo el resultado que ha tenido el de mi hija, no tienen muchas esperanzas de obtener justicia.
AP.- ¿Cuantas chicas llevan rescatadas de la trata de personas?
ST: No tengo un número exacto pero es entre 900 y 1000. Al principio, yo iba a todos los allanamientos buscando a mi hija y ahí rescaté a centenares de chicas y las llevé a mi casa para darles aunque sea una mínima contención. Después de 2007, con el nacimiento de la Fundación los rescates se realizaban a través de denuncias recibidas en la Fundación, pero de las que yo no participaba personalmente. Según los números del Programa Nacional de Rescate y asistencia a la víctima de trata de personas, desde la sanción de la Ley 26364 en 2008, se llevan rescatas en todo el país cerca de 5000 personas.
AP.- Sabemos que la tarea de la fundación es ardua en cuanto a la contención de las víctimas de trata, ¿Cuál es la asistencia que reciben las chicas una vez rescatadas?
ST: En primer lugar se les hace conocer sus derechos, que implican por ejemplo que tiene derecho a declarar una sola vez y en una fiscalía acompañada de un psicólogo capacitado en la temática y que sus tiempos para poder relatar lo sucedido deben ser respetados. Luego de ese paso es contenida por psicólogos, abogados, asistentes sociales y médicos, si llegara a necesitarlos. El tratamiento de recuperación continúa de manera indefinida y acompañar a las víctimas en el proceso de crear un nuevo proyecto de vida, es una de las metas centrales de la Fundación.
AP.- Uno de los mayores problemas que tenemos para combatir este tipo de delitos es el machismo, y su concepción de la mujer como objeto, este es un problema cultural, tenemos entendido que desde la fundación también se aborda este aspecto del problema a través de actividades de concientización. ¿Cuáles son y cómo se desarrollan?
ST: Solemos trabajar con la consigna “Sin clientes no hay trata”, porque la realidad es que si no existiera demanda del hombre prostituyente, los prostíbulos no tendrían razón de ser y la trata de personas con fines de explotación sexual dejaría de ser un negocio tan rentable como lo es ahora. Además, cada hombre que concurre a un prostíbulo contribuye con dinero a la mafia que explota mujeres
Damos charlas en colegios secundarios, en entidades religiosas o de bien público, abiertas al público en general. Ahí también aprovechamos para hacer prevención, hablar de los métodos de captación y de cuál es la mejor forma de cuidarse y cuidar a su entorno.
AP.- ¿La fundación se sustenta con donaciones, reciben ayuda de mucha gente?
ST: Nuestra mayor fuente de ingresos es el Estado, ya que la asistencia que brindamos es la que debe prestar el Estado, de acuerdo a las leyes vigentes. Después recibimos donaciones de particulares, de algunas empresas y presentamos proyectos específicos para ser financiados por organismos de créditos nacionales o internacionales. Gracias a Dios, es muchísima la gente que nos acompaña y colabora desde donde puede. Se siente el amor y el cariño. Por eso estoy muy agradecida.
AP.- Según sus palabras Néstor Kirchner y Cristina también la han ayudado mucho. ¿Nos puede contar como han sido sus encuentros con ellos?
ST: Á Néstor lo conocí en el Tedeum del 9 de julio en Tucumán, al año siguiente que había desaparecido mi hija. Le entregué una carta contando el caso y a las semanas me llamaron de Casa de gobierno para que les contara más. Conté esta anécdota después de su fallecimiento, porque él siempre decía que me iba a ayudar pero con perfil bajo, porque con el dolor de una madre no se hacía política. Después, con la presidencia de Cristina, los encuentros fueron más seguidos. Ella siempre me dice que me admira y que apoya mi lucha. Para mi es un honor.
AP.- ¿Hubo avances institucionales y legislativos en el último tiempo en nuestro país acerca del delito de trata? ¿Qué valoración hace de ellos?
ST: Si, en la Argentina ha habido muchos avances en materia legislativa y de persecución del delito, pero esto no significa que ya está todo hecho ni que el problema esté solucionado, porque si no todas las chicas que nos faltan estarían con nosotros. Todavía falta, sobre todo en los procesos judiciales, que son demasiado lentos para dar condenas, pero vamos por buen camino.
AP.- En la argentina se destacan las mujeres que luchan a partir de casos muy dolorosos, como el caso suyo o de las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, ¿Por qué cree las mujeres se ponen al frente de estas luchas?
ST: Porque somos madres, y haríamos lo que fuera por recuperar a nuestros hijos. A mi me han amenazado, me han querido matar, me han quemado mi casa, pero eso no va a amedrentarme. Yo voy a seguir buscando a mi hija hasta las últimas consecuencias. No les tengo miedo, sólo quiero saber dónde está Marita y que los que le han hecho pasar por todo esto paguen su condena en la cárcel. Siempre admiré a las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, pero nunca pensé que iba a tener que enfrentarme a un dolor tan fuerte como les ha pasado a ellas. Por eso creo que nos comprendemos tanto entre nosotras, desde nuestro lugar de madres y desde la lucha por la justicia. Hace poco me encontré a Marta Vázquez y me dijo algo que para mi fue muy fuerte: “Ojalá tuviera menos años para acompañarte más en tu lucha”. Las admiro muchísimo.
AP.- Más allá que Micaela aún es una niña, en el último tiempo ya se presenta como acompañante incondicional de su lucha, ¿De qué manera usted vive esta situación?
ST: Con mucho orgullo. Ella se ha criado con la verdad y fue decisión de ella asumir la postura que hoy asume, de lucha contra la trata de personas.
AP.- ¿Qué actitudes podemos tomar todos y todas en nuestras vidas cotidianas para combatir este delito?
ST: En primer lugar, lo que pregutaban al principio, de tratar de hacerle entender a la sociedad en su conjunto que sin clientes no hay trata y que las mujeres no son cosas que se compran o alquilan por un rato de placer. Por otro lado, mantenerse informados sobre los métodos de reclutamiento y charlar en familia sobre lo que es este delito, lo que implica y a quienes involucra. Y por sobre todas las cosas, entender que esto puede sucederle a cualquiera: no es algo que solo pasa en lugares lejanos o a personas muy pobres. Hay que tomar conciencia. A la trata la combatimos entre todos y todas.
AP.- A raíz de declaraciones suyas con respecto a la presidenta, hay un medio de comunicación que la está cuestionando justamente es el medio que hizo mucha plata con los avisos clasificados donde contenía el rubro 59. ¿Cómo vive esa situación?
ST: Yo voy a seguir trabajando tan fuerte como hasta ahora. No tengo nada que ocultar, estoy muy tranquila.
AP.- Todavía son muchas las chicas que falta encontrar entre las que se encuentra Marita, ¿Qué mensaje puede usted dejarles a ellas?
ST: A ellas sólo decirles que las seguimos buscando y las seguimos esperando.

Entrevista realizada en Aluvión Popular

Uncategorized

Foros nacionales hacia una agenda de cultura digital en Argentina

Published by:

Gestores, empresarios, investigadores, académicos, instituciones y organismos públicos debatirán desde mañana y hasta el jueves en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires la cuestión de la cultura digital en su dimensión global, que incluye lo económico, social, regulatorio y tecnológico, para incorporar este tema en la agenda de nuestro país y de la región.
Desde mañana se desarrollarán los primeros “Foros de cultura digital, hacia una agenda para la cultura digital en Argentina” con el objetivo de “tomar globalmente la problemática de la cultura digital en su conjunto”, definió Rodolfo Hamawi, director nacional de Industrias Culturales en diálogo con Télam.
Estos primeros Foros se plantean como una experiencia inicial que luego se replicará a lo largo y ancho del país para “abrir un debate, incorporar actores a la discusión y fijar una agenda de problemas y tareas en este momento de transición que vive el mundo con la irrupción de lo que se denomina cultura digital, y que el Estado debe tener en cuenta para enfrentar en los próximos años”, explicó Hamawi.
Divididos en cuatro nodos, que responden a los diferentes sectores del concepto integral de cultura digital, los encuentros parten desde la premisa que “estamos ante un fenómeno de gran concentración y ante el gran riesgo de que nuestras producciones no tengan posibilidad. Por eso, aunque la tecnología va mas rápido que las decisiones políticas nosotros no podemos mirar como esto se desarrolla pasivamente”.
De ahí que poner en discusión este concepto, explicó el funcionario, responde a que “hay una trasferencia de la forma de producir cultura, en donde buena parte de la producción analógica -libro, disco, la película en formato físico- empieza a ser producido y consumido a partir de Internet con ventajas como la posibilidad de acceso a la cultural pero al mismo tiempo con otras a resolver”.
Algunas de esas variables a repensar son el acceso y la brecha digital que se genera ante el avance de internet. “El tema digital nos obliga tener una agenda de incorporación de la población a este recurso”, indicó el funcionario.
En ese sentido, Hamawi explicó que nuestro país “está haciendo aportes importantes para achicar esa brecha con los programas de Argentina Conectada, Conectar Igualdad, TVA, entre otros, que al mismo tiempo implica una forma de alfabetización digital”.
Una segunda variable de análisis que viene es “la tensión entre el acceso a contenidos culturales y el derecho de los productores a recibir una remuneración por esa producción. En Argentina por la venta de libros, música y butacas de cine se recaudan aproximadamente 3.000 millones de pesos al año, mientras que en Internet por conexión domiciliaria alcanza los 9.000 millones. Acá hay una transferencia de recursos de un sector a otro”.
Por otro lado, hablar de cultura digital es también hablar de una dimensión social: “Tenemos que discutir cómo nosotros trabajamos la incorporación de nuevos sectores de la población al disfrute de estos bienes culturales”, algo que desde la Secretaría de Cultura en conjunto con otros organismos estatales viene trabajando en experiencias como la Plataforma Argentina de Música (PAM) y el Portal de Libros Universitarios Argentinos (Plua).
En ese sentido, Hamawi puntualizó que “hay que lograr que nuestras producciones tengan visibilidad en ese inmenso universo que ofrece Internet”.
Y esto a la hora de pensar una agenda nacional hacia la cultura digital va de la mano del aspecto legislativo y regulatorio, porque, señaló el funcionario, “cada vez se concentran más las empresas distribuidoras de contenidos, casi todas radicadas en Norteamérica”.
Por eso, prosiguió, “tenemos que garantizar visibilidad de nuestra producciones y también una neutralidad de la circulación, que no haya mayor visibilidad de un producto a partir de un acuerdo comercial”.
Es lo que se denomina “neutralidad en la red” y en Argentina ya se vienen desarrollando varios proyectos de ley para aplicarla porque es esencialmente democrático “que todos los contenidos circulen con la misma velocidad y posibilidad de ser consultados”, precisó Hamawi.
En un intento de cara al futuro y también del presente, estos primeros Foros, que contarán con la presencia de especialistas de diferentes sectores de la cultura y la comunicación, se plantean como una instancia de debate, reflexión y puesta en común para pensar una agenda de cultura digital en nuestro país y “proponer normativas más justas en pos de la inclusión social”.
La idea, redondeó el funcionario, es “que desde el gobierno nacional junto con académicos, productores, pueda trazar un mapa, anticipar escenarios de manera de tener formas legislativas y de regulación de un sector, que como cualquier sector económico si no hay participación de lo público tiende a la concentración y exclusión”.
Desde mañana y hasta el jueves en la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, avenida Córdoba 2122, los primeros “Foros de cultura digital, hacia una agenda para la cultura digital en Argentina” organizados por la Secretaría de Cultura, serán el punto inicial para debatir en conjunto en términos globales -esto es desde su dimensión económica, legislativa, social y económica – la cuestión de la cultura digital en Argentina y la región.

noticias

América Latina y la nueva guerra del Imperio

Published by:

Por Jorge Beinstein
Hace cerca de una década, en el momento más eufórico de la era Bush el entonces Secretario de Defensa, Donald Runsfeld, había proclamado lo que aparentaba ser una fanfarronada imperial: los Estados Unidos podían combatir en dos frentes al mismo tiempo. Se refería a las guerras de Irak y de Afganistán.

Guerra de Cuarta Generación

Desde el punto de vista militar convencional, la ocupación duradera de ambos países requería un volumen de tropas y material que excedía o se encontraba en el límite de las posibilidades de las Fuerzas Armadas norteamericanas. Incluso sumando contribuciones significativas de sus principales vasallos de la OTAN, como Inglaterra o Francia, y de algunos estados asociados como Israel o Colombia, resultaba muy difícil sostener una guerra prolongada de esas características. Así lo sustentaban los expertos no embarcados en la propaganda de los halcones.
Pero ocurre que el discurso de Runsfeld no se refería a las guerras tradicionales como la de Vietnam donde el Imperio fue derrotado, sino a un nuevo tipo de agresión cuyo objetivo no es el control integral del territorio y de su población para instaurar un nuevo orden colonial sino todo lo contrario: caos, desestructuración social e institucional, derrumbe de los patrones culturales de la población con el fin de ocupar unas pocas zonas donde se localizan recursos naturales estratégicos, por ejemplo, el petróleo en los casos de Libia o Irak o bien, como en el caso de Siria, para desarticular completamente un país, convertirlo en un no-Estado, anulándolo como barrera a la conquista de una zona próxima (Irán), despejando obstáculos para el despliegue de fuerzas aliadas (Israel). Estamos hablando de “Guerra de Cuarta Generación”, es decir, de agresiones que no se limitan a la destrucción de Ejércitos enemigos sino que amplían su enfoque hacia el conjunto de la “sociedad enemiga”, buscando destruirla como tal, empleando un mínimo de fuerzas militares formales, sobre todo poniendo el énfasis en armamentos de alta tecnología supuestamente invulnerables a la respuesta de los agredidos (drones, misiles, aviación de última generación, etc.), desplegando un aplastamiento mediático que aísle y desprestigie a la víctima, utilizando mercenarios en abundancia y pequeños equipos de tropas regulares actuando como escuadrones de la muerte agrupados en el Comando Conjunto de Operaciones Especiales o “JSOC” (Joint Special Operations Command) en línea de mandos directa con el Presidente y el Secretario de Defensa con autoridad para elaborar su lista de asesinatos, con su propia división de inteligencia, su flota de drones y aviones de reconocimiento, sus satélites e, incluso, sus grupos de ciber-guerreros capaces de atacar redes de Internet. La ilusión de los estrategas del Imperio y sus aliados occidentales es que el ablandamiento, la desintegración social e institucional de vastos espacios periféricos les permitirá ejercer sobre ellos una suerte de metacontrol flexible dejando la vía libre al saqueo de sus recursos naturales (tierras fértiles, petróleo, gas, litio, agua, oro, cobre, etc., etc.).

Crisis y militarización

Como sabemos, los Estados Unidos y Europa se encuentran acorralados por una grave crisis de larga duración, sus mercados internos decaen aplastados por las deudas, sus grandes empresas ven descender sus ganancias, su sistema financiero que engordó en el pasado parasitando sobre las estructuras productivas se encuentra bloqueado desde hace un lustro, algunos recursos naturales decisivos como el petróleo han llegado al techo de su extracción e incluso, otros como las rocas fosfáticas, imprescindibles para la agricultura, ya se encuentran en la etapa declinante a causa de la explotación salvaje del último medio siglo. La conducción estratégica de esas élites imperiales, es decir, el Poder del sistema de poder occidental, su núcleo militar-financiero, ha llegado a la conclusión de que una explotación aún más devastadora de los recursos naturales periféricos les permitiría recomponer las tasas de ganancias de sus empresas abaratando costos tendencialmente en alza, por ejemplo, los costos energéticos. La revolución tecnológica posibilita realizar el saqueo agro-minero con muy bajo empleo de mano de obra de tal modo que el ciclo “producción periférica-exportación” puede prescindir del grueso de las poblaciones locales: sus Sindicatos, estructuras estatales, culturas, etc. son visualizadas por estas mafias imperiales como obstáculos a eliminar. Los buenos negocios de dichas élites, su “seguridad jurídica” (?) necesita de la existencia de grandes vacíos legales, de desiertos o burdeles institucionales en los territorios sometidos. Sin embargo, esos objetivos enfrentan serias resistencias de potencias y asociaciones de países emergentes: China, Rusia, el Mercosur, el BRICS, Irán, etc., no sólo traban dicha ofensiva sino que además empiezan a desplazar al Imperio de espacios en otros tiempos sometidos a sus dictados. Es contra esa periferia no esclavizada que los Estados Unidos y sus aliados de la OTAN desarrollan cuatro grandes ofensivas; en Asia Central y Medio Oriente, en el Océano Pacífico apuntando a China, en África y en América Latina. No se trata de despliegues aislados sino intercomunicados, por ejemplo, la ofensiva africana con la de Medio Oriente, la de América Latina con la del Pacífico asiático, etc.

MANOS LATINOAMERICA_OTRAAAAAA_CLARA

América Latina

América Latina aparece ante los ojos imperiales como una importante reserva de recursos estratégicos. Desde ya, son los recursos petroleros lo que coloca a Venezuela en la mira de Washington a lo que se agrega su rol geopolítico antiimperialista, pero también el litio, de primera importancia en la reconversión energética global: Bolivia posee el 50 % de las reservas de litio del mundo y si agregamos a Chile y Argentina, llegamos al 85 %. Y por supuesto, los biocombustibles, pensando en las grandes extensiones agrícolas de Argentina, Brasil, Colombia, etc., las reservas de agua (el Acuífero Guaraní) y los recursos mineros del conjunto de la zona andina. Entre esas riquezas y el Imperio, se presentan Estados, poblaciones, culturas, alianzas regionales, gobiernos populares… Es decir, América Latina como identidad, como sujeto que es necesario desestructurar. Es este nuestro capítulo en el diseño occidental de guerra planetaria en curso.
Para las potencias occidentales no se trata de que retornemos al Neoliberalismo de los años 1980-1990, esa es historia antigua en la que todavía creen buena parte de las viejas camarillas políticas de la región. El objetivo principal del Imperio no es el saqueo de nuestros mercados internos, de nuestras finanzas, nuestras industrias… aunque esos bocados no serían despreciados en una reconquista colonial. Le interesan nuestros recursos naturales y para ello es necesario someternos a un esquema agro-minero exportador extremadamente elitista con la abrumadora mayoría de la población expulsada del sistema. Ese modelo no necesita “gobernabilidad” (aunque sea de derecha) sino desarticulación social, caos durable, ausencia de Proyectos Nacionales. El carácter degradado de las elites conservadoras latinoamericanas más parecidas a lumpenburguesías, a grupos de bandidos, a fuerzas abiertamente entrópicas que a castas oligárquicas medianamente estables, encaja perfectamente con las estrategias imperiales. En ese sentido, al menos en los países con gobiernos populares es posible describir en el espacio de poder hostil a esas experiencias dos niveles de decisión, el de las derechas locales sumergidas en sus pequeños juegos, en sus ilusiones de rapiñas, sus nostalgias de la era Neoliberal y el del Imperio que manipula a esas derechas pero colocándose por encima de sus delirios. Tratando de desestabilizar a los gobiernos pero intentando evitar reacciones populares que radicalicen esos procesos como ocurrió con la tentativa de Golpe de Estado en Venezuela hace cerca de una década o con Cuba a comienzos de 1960. Nos encontramos entonces, frente a una ofensiva imperial compleja que combina desestabilizaciones, arremetidas de las derechas locales, presiones externas (a veces brutales como en el reciente bloqueo del vuelo del Presidente boliviano por territorio europeo), “integraciones” coloniales como la creación de la “Alianza del Pacífico”, buscando quebrar la integración regional autónoma (Unasur, Mercosur, Alba, Celac), etc. Sin embargo, las maniobras pretendidamente racionales del Imperio quedan sometidas, son muchas veces malogradas por las urgencias, los tiempos desordenadores de la elite imperial acosada por una crisis cada vez más intensa, por una decadencia que degrada sus sistemas estratégicos. En última instancia, los estrategas piensan, proponen, implementan pero la crisis decide colocándose por encima del Poder. Y una expresión clara de la misma es la crisis de dominación cuya cara positiva es la emergencia de espacios de libertad en la periferia: la hora del Imperio se acorta entre otras cosas porque viene avanzando la hora de los Pueblos.

Escrito para Aluvión Popular